Mercadillo Navideño Alemán

 A los alemanes les viene a gustar tanto la navidad como la cerveza y aunque estén a kilómetros de casa no les falta ocasión para reunirse y celebrar ya sea el Oktoberfest o un Adventsbasar.

En Madrid hay dos iglesias alemanas y ambas celebran un pequeño mercadillo navideño con la llegada del Adviento, aunque la católica lo hizo ya la semana pasada.

Este fin de semana aún estáis a tiempo de entrar en calor con un Glühwein, que hace que entres en calor aunque estés en bikini. Es una especie de vino caliente con especias típico de estas fechas y es otra de esas bebidas que haces que te plantees qué gusto tienen los teutones para estas cosas, aunque sigue siendo superada por la Coca Cola con Fanta que toman.

 El Mercadillo se lleva a cabo en la Iglesia evangélica alemana que está el el Paseo de la Castellana 6, metro Colón.
Es uno de esos lugares poco conocidos que tenemos y que aunque sea para ver la arquitectura merece la pena, y claro una vez allí ya podemos aprovechar para comer algo típico alemán.

 Podéis encontrar verdaderas gangas de casi cualquier cosa ya que mucha gente dona cosas que ya no quiere o necesita.
Hay un apartado de ropa de segunda mano, donde hay desde bolsos, cinturones, pañuelos, jerseys y hasta he visto un chico comprando unas botas para esquiar.
Hay otra sección con libros en alemán de todos los tipos posibles desde cuentos infantiles y libros juveniles hasta best sellers. Curioso ver el tipo de literatura infantil que tienen con libros con Freud como protagonista.
Lo mejor: los precios, desde 1€

 Pero sin duda alguna la sección de repostería y productos artesanales es lo mejor, con miel y mermeladas caseras de casi cualquier sabor.

 Hay calendarios, calcetines...o incluso centros navideños hechos a mano.

De la emoción me ha salido movida la foto, pero esos bizcochitos son de vicio (1,50€ la porción)
También hay puestos de salchichas por todos lados desde 2€, ensalada de patata, gofres. Lo más caro que he visto era un plato con un poco de todo por unos 6€.

El recinto es muy pequeño y hay bastante afluencia sobre todo en la zona de la comida, que aunque está en un patio no sientes el frío.

Empezó el viernes pero aún podéis ir mañana de 12 a 15.