DORMIR DE UN TIRÓN

 A veces los nervios ya sea por el trabajo, los exámenes o por no encontrar los donuts mix, te pueden dejar sin dormir y precisamente eso es lo que me ocurrió hace unas semanas.

Me despertaba en mitad de la noche y me costaba conciliar el sueño. Para colmo como me pusiera a pensar me acordaba de alguna peli de miedo o de American Horror Story y casi que prefería no cerrar los ojos no fuera a ser que acabara en una bañera con hielos, una cicatriz en el costado y una nota de agradecimiento por un riñón.

Cuando el Fitbit me mandó las estadísticas que decían que el promedio de veces que me despertaba por la noche eran 23, decidí poner remedio y sólo necesité dos cosas:
-Bruma para almohada de lavanda L'Occitane
-Rooibos Duerme Negrito

En el caso de la bruma se trata de una especie de colonia para la almohada con aceite de lavanda que tiene un efecto relajante.
El olor de la lavanda no era precisamente de mis favoritos pero ahora ha cambiado mi opinión al respecto, gracias a los resultados.
Justo al irme a dormir aplico dos pulverizaciones en la zona de la almohada en la que me suelo quedar dormida y es una maravilla.
La primera vez ya noté el resultado y dormí casi de seguido.
No mancha ni produce decoloraciones en la almohada.
Tampoco mancha el pelo o lo engrasa más rápido.
El bote tiene 100ml
Precio 16€
De venta en tiendas L'Occitaine y tienda on line
Las siguientes estadísticas me daban resultados de un 99% de efectividad de sueño y sólo 6 veces en las que me despertaba que suelen coincidir con los despertadores de los vecinos.

 El otro aliado fue el rooibos Duerme Negrito.
Ya habái probado el Niños Traviesos y quise probar si esta versión era algo más fuerte.
La primera noche, por eso de si funcionaba o no, acabé tomando 3 tazas y mano de santo.
Tiene rooibos, valeriana, espliego, azahar, manzana, aciano y malva.
Se ha convertido casi en un ritual antes de irme a dormir.
2,30€
50gr